Escribir no es fácil. No se trata solamente de colocar palabras una detrás de otra formando frases mínimamente inteligibles. También hay que saber qué quieres transmitir y conseguirlo con la expresión adecuada.
Para escribir bien es necesario un mínimo de tranquilidad, y en la actualidad, con tantas distracciones a nuestro alrededor, es difícil concentrarse en lo que estamos escribiendo.
Por suerte, existen editores de texto que te ayudan a enfocar la atención en lo que escribes y así evitar que un correo o una conversación de chat te hagan perder la concentración.
Los hay para todos los gustos, aunque todos tienen en común el diseño minimalista, con los elementos imprescindibles para escribir y poco más. Como mucho, te ofrecen la posibilidad de cambiar el color de fondo y de la letra. Algunos incluso muestran una imagen en segundo plano.
El objetivo de estos editores es que delante tuyo solamente tengas tu texto, sin adornos ni complicados menús propios de una suite ofimática.
Un fondo monocromo y el cursor parpadeando, esperando a que empieces a teclear. No necesitas nada más para escribir. También ofrece estadísticas y avisador, para no escribir más de la cuenta.
A primera vista te recordará un terminal o línea de comandos. Dark Room recuerda a los antiguos procesadores de texto para DOS, pero incorpora autoguardado y permite cambiar el color de fuente y fondo.
Totalmente minimalista y a prueba de distracciones. Está basado en Java y ofrece atajos de teclado.
Más completo que los anteriores, pues permite colocar una imagen de fondo y regular la transparencia de la ventana principal.
Tal vez eches de menos algo en los editores anteriores. WriteMonkey integra corrector ortográfico, además de un buscador para encontrar el párrafo en el que te habías quedado.
Otro editor minimalista. Permite escoger el color de fondo y de letra y poco más. Su particularidad es que no tiene función de borrado, así que te será muy útil para escribir si estás muy inspirado.
TextRoom imita el sonido de una máquina de escribir y cuenta con buscador. Perfecto para escritores nostálgicos.
Estos son los más relevantes, aunque seguramente conozcas más. ¿Cuál es tu preferido? ¿Conoces otro truco para que nada te distraiga mientras escribes?
